Se acaba de rechazar en el Parlamento Europeo la posibilidad de que los gobiernos de la UE puedan denegar el acceso a internet como un medio para imponer sanciones a los consumidores: 428 votos a favor, 25 en contra y 21 abstenciones. A raíz de esta resolución el pleno de dicho organismo ha hecho hincapié en el hecho de que el acceso a internet asegura a los ciudadanos un "acceso a la escolarización" frente al "analfabetismo electrónico" que será un rasgo de una amplio espectro social durante este siglo XXI. Asimismo incide en el hecho de la protección de los derechos de propiedad intelectual instando a los distintos gobiernos que adopten las medidas penales necesarias, siempre y cuando no se base en "el control y la vigilancia sistemática" de los usuarios. Cuestión esta que creía yo superada a estas alturas de la película, pero ya veo que a algunos dirigentes políticos siguen en el 1984 de Orwell.
Otra cuestión interesantes que se trataron en el Parlamento fue el concepto de "identidad digital" con una parte más de la identidad personal de cada uno de nosotros, y por tanto digna de ser protegida correcta y eficazmente, tal como en España define la LOPD, (Ley Orgánica de Protección de Datos 15/1999, de 13 de diciembre) y la lucha contra la ciberdelincuencia y la usurpación de identidades.
Bueno creo yo que la decisión de los señores del Parlamento Europeo se ajusta a la lógica y a la dinámica de los tiempos en que vivimos. Esta decisión tumba iniciativa como la del Gobierno Francés o exigencias como las defendidas por grupos como la SGAE, aquí en España. La aprobación de este informe, a parte de ponerse de acuerdo con los tiempos y los modos que nos toca vivir, contempla aspectos tan básicos y los protege, como son la privacidad de las personas y la libertad de expresión.
A los "iluminados" que platearon esta iniciativa ante el Parlamento más les vale que levanten los ojos del suelo y miren alrededor suyo a ver si se enteran de que va esto.
