Durante estos días, cada vez que me siento en alguna barra de cafetería a tomar mi café solo y el pincho de jamón y queso y escucho lo que habla la gente, lo que se cuentan o cuando vuelvo a casa y oigo la radio y miro a través los los cristales golpeados por una lluvia que se ha instalado definitivamente, veo como las cosas parece que se estropean cada vez más. Este pesimismo se apodera de la vida de la gente, un pesimismo que esta relacionado muy mucho con las malas artes de unos cuantos, de muchos de los que nos dirigen, de los que se presentan como servidores de lo publico, defensores del estado del bienestar y paladines de los débiles e indefensos. Sus promesas, bueno, y en general sus palabras me resultan indecentes, inútiles, son "bla, bla, bla,..." que solo pretenden ocupar sitio a fin de desviar la atención. Muchas, muchas veces acabo apagando la radio, o la televisión o pasando directamente a los anuncios,....antes de cabrearme un poco más ...conmigo mismo.
Estaba parado hoy en un semáforo, volviendo del trabajo, mientras llovía sin cesar y donde el frío se sentía de manera especial cuando me fije el la gente que caminaba, con paraguas, pegada a los edificios, y la que cruzaba el paso de peatones, cuando en la radio comenzó a sonar el tema de Jack Johson titulado "No Other Way ", y me vino a la cabeza, mientras observaba como la gente se movia al ritmo de la canción, que pasaría si nos pusiésemos a cantar todos: seguro que nos lo pasaríamos bien, o al menos algo mejor, puede que hasta parase de llover, igual ese pesimismo o miedo a que pasará mañana se olvidase, o unos nos reiríamos de como desafinamos,...
A raíz de todo esto recordé que existe un proyecto llamado "Playing for chage" (su web) que pretende a través de la música hacer que la gente se sienta próxima, que se sienta solidaria y participe de las circunstancias vitales de los demás. Este movimiento social busca a través de la música recaudar fondos para luchar contra el sida en el continente africano, ayuda a reconstruir escuelas, refugios, aldeas, pozos,...
El origen de este movimiento fue el documental “Playing for Change - Peace Through Music“, de los directores Mark Johnson y Jonathan Walls, los cuales buscaban demostrar que "la música puede unir corazones sin importar su raza sus diferencias sociales, religiosas y políticas."
Es solo música?
Nunca es sólo música... es vibración, es emoción, es cercanía. Por eso estrecha, por eso acerca, por eso une.
ResponderEliminarDecía Dostoievski "Aquel que consigue dominar el gris de cada día es un héroe". Con la pertinaz lluvia, con los incompetentes mandamases o con los ciclos de pesismismo recurrentes es necesario cantar... aunque sea por dentro.
Seguro que alguien siempre nos escuchará.
La virgen! No lo habia visto..
ResponderEliminarGoose bumps!!!!