No es que sea un tipo muy exigente, pero cada vez me resultan mas inaguantable los imbéciles. Cuando hablo de imbéciles, no creo que deba especificar mucho a quien me refiero. No digo que sean, estas gentes , malas personas, no, con ser imbéciles tienen suficiente. Me jode todo el día tel hecho de encontrarme con uno, por no decir varios, y tener que escuchar sus sandeces, sus opiniones revestidas de una falsa autoridad o de un conocimiento de las cosas que no se sustenta en absolutamente nada, por no decir el tener que aguantar sus comentarios egocéntricos, sus “penas, penitas, penas”, sus palmaditas en la espalda o sus sonrisitas.... Odio profundamente a esos que hablan y no dicen nada, perdón, quiero decir a los que hablan y sitúan el porque de las cosas más sencillas en estanterías donde lo único que puede existir es un puto florero de artificiales flores,....
No soy precisamente una persona con un amplio conocimiento de nada, bueno ni mediano, pero me gusta estar calladito y “exijo” no tener que escuchar y ver todas las tonterías que uno oye y ve todos los días. Puede que sea una manera de salir de la mas triste mediocridad, puede que sea la única manera de dejarse ver, puede que piensen que los imbéciles tienen sus cinco minutos de “prime time”, puede que fuese necesario decirle de vez en cuando “mira chaval, deja de hacer el imbécil que así no llegaras a ser más que eso”. Puede que eso es lo que deba decirles a la cara a todos ellos. Puede que si